lunes, agosto 15, 2011

Vivir con miedo

Es horrible vivir con miedo. Salir de casa sin saber si vas a regresar o no con los tuyos. Caminar por las calles con zozobra. El temor hace mella en los peruanos, por los altos índices de delincuencia que se registran en las grandes ciudades del país. Peor aún para las personas que hemos sido víctimas de esa violencia no una, como en mi caso, sino varias veces.


Ya ni siquiera sirven las recomendaciones de seguridad que todo el mundo pretende darte. Y está comprobado que nadie se salva, pues la hija de un Parlamentario, que cuenta con resguardo personal, fue atacada junto a su madre y sobrevivió de milagro. Los que hemos vivido la violencia terrorista vemos renacer nuestros temores, enfrentados a un nuevo enemigo: la delincuencia común. Y también está comprobado que no existe zona segura en Lima, pues los actos delincuenciales se registran por igual en San Juan de Lurigancho o en San Isidro. La muerte ronda nuestras calles. Los niveles de violencia son espantosos.


He sido atacada en Pueblo Libre, San Miguel y Los Olivos. La experiencia es traumática para todos los que pasamos por situaciones de este tipo, porque así los delincuentes no te hayan herido , el daño psicológico es inminente. Sentir que te apuntan con un arma de fuego, que te retienen por horas en un auto mientras "limpian" tus cuentas bancarias o que, llegando a casa, unos tipos bajan de un auto y te despojan de cuanto objeto de valor tienes, es realmente escalofriante.


Por todo ello, demandamos medidas urgentes contra la delincuencia. No podemos seguir "sobreviviendo", merecemos tranquilidad.


Amo a mi país y me enorgullece su crecimiento económico, su riqueza cultural, el empuje de su gente. Pero creo que todo ello queda ensombrecido por la violencia delincuencial que está causando un daño irreparable en los peruanos. Trabajemos para que esto termine de una buen vez y podamos vivir en paz, como lo merecemos, para disfrutar de nuestro Perú.